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viernes, 7 de septiembre de 2012

Como juega el mejor 9 del mundo

Después de la exhibición de Radamel Falcao hace una semana en la SuperCopa de Europa, he encontrado un fabuloso artículo en Ecos del Balón, en el que hablan de cómo juega el que para mi es el mejor delantero centro del mundo (ya comenté que le consideraba así el año pasado antes de fichar por el Atleti -leer artículo 1 y artículo 2-).

Explica a la perfección los movimientos en fase defensiva de Falcao, y también como realiza sus acciones en ataque, y cómo da apoyo y se desmarca para sus compañeros. Creo que es un texto que todo aquel que quiera jugar de delantero centro debería tener en cuenta, y los entrenadores (o los que queremos serlo) también debiéramos hacerlo para orientar a nuestros puntas:

"Falcao cuenta con tres artes decisivas
1. Su extraordinaria descarga en transición. 
2. Su consistente capacidad para proteger el balón en solitario y volcar las piezas del terreno hacia el lado óptimo. 
3. Y, por supuesto, su talento para el remate, parámetro en el que se posiciona como el nº 1 del presente. Física y técnicamente está construido para potenciar ese autóctono ramillete de acciones, germen de su diferencial valor táctico.

Radamel apenas sale en el plano televisivo, pero su posición siempre es conocida. Cuando su equipo no tiene la pelota, búsquenlo en el flanco del balón. Desde ahí niega al otro el sosiego del pase atrás, al tiempo que queda habilitado para recibir inmediatamente desde el robador y administrar la transición. Nunca hará la de Agüero contra Rácing, pero ningún desmarque de uno de los suyos caerá en saco roto. 

Si es su colectivo el que ataca, pueden darse dos escenarios. El primero es que el juego se asiente en el carril central, a lo que responderá sujetando al eje de la zaga, aislándolo del resto de la partida. La velocidad de la cadena asociativa le dicta el siguiente paso. Si es lenta, se descolgará a espaldas de mediocentros para que el conductor pivote sobre él y reciba de cara. Si es rápida, tirará un agresivo desmarque dentro-fuera con visos de definición instantánea, preferiblemente hacia el perfil derecho, aunque el izquierdo no le es ciego. ¿Y si el ataque acaricia la orilla? Entonces sólo le distinguirán con prismáticos, porque estará lejos, lejísimos, más allá del segundo poste. Lo aterrador de su remate alerta a tres, como poco. E incalculable resulta el beneficio de estirar tanto un sistema defensivo hacia el lado opuesto al balón.

Sería inadecuado convertir nuestra pasión en una limitación. Por descontado, lo que hace a Falcao una figura imponente es su abultado expediente goleador, pero se hacía necesario describir al mejor delantero centro de la Liga BBVA más allá de la cifra. Es el no error en el juego de los errores, un cúmulo de decisiones acertadas que acaban diseñando un contexto positivo a su colectividad. Sin inventar nada, sin superar en ningún momento lo racional, sin hacer algo diferente a lo que el entrenador contrario repetirá mil veces a su equipo en las sesiones de entrenamiento previas al choque. No lo necesita. Ni para influir como crack, ni para ser un futbolista de culto." 

Artículo extraído de Ecos del Balón (ver artículo). También muy recomendable el artículo sobre la Final de la SuperCopa de Europa (leer Ecos del Balón):

"El delantero no solo goleó. Él no defiende, pero siempre está en el lado ofendido, para recibir presto el pase frontal que nadie le quita nunca. Sacó así al Atlético del área tras cada robo, orientando la transición hacia el lado débil y siempre en el momento justo. Es increíble. Es buenísimo."