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sábado, 6 de febrero de 2010

Lección de Miguel Angel Portugal

No es sencillo que un entrenador enfadado después de un mal partido de su equipo, tras perder 4-0 en el que según él era el partido más importante de su carrera y además habiendo visto cómo su equipo era claramente perjudicado por el árbitro, haga unas declaraciones como las que escuchamos de Portugal el pasado jueves.

El entrenador burgalés del Racing reconocía los errores arbitrales, pero los quitaba importancia comparándolos con errores que comenten sus jugadores durante el partido, o que comenten los propios entrenadores. No es habitual que un entrenador perjudicado por el árbitro hable en este tono, más bien suele hacerlo el favorecido. Una lección en un mundo a veces demasiado desquiciado buscando conspiraciones arbitrales (¿villarato?).

Y también es una lección para algunas actitudes que estoy viviendo este año en partidos de fútbol base. Ya escribiré un día con más tranquilidad, pero estoy ayudando a entrenar a un equipo de infantiles y nos hemos encontrado con entrenadores rivales que parece que no tienen muy claro lo que es importante cuando se entrena a niños de 12 o 13 años. Y más aún cuando nos arbitran chicos de edad similar. Gente que prefiere buscar el confrontamiento, la discusión y la pelea constante, en vez de disfrutar con lo que van creciendo los niños día a día. Y también dejar a los propios arbitros que vayan mejorando dandoles confianza en los partidos. Creo que deberíamos aprender de la tranquilidad de Portugal en un día así. Nos dió una lección a todos.

2 comentarios:

FERNANDO SANCHEZ POSTIGO dijo...

pues ayer domingo se le olvidó la lección con sus declaraciones. un abrazo.

Javier Sastre dijo...

Cierto es Fernando. La verdad es que fue todo lo contrario, no sé si bascando calentar la vuelta de la Copa o qué... Al menos, no le sirvió de mucho.